La primera marisquería de calidad de Barcelona



Así empezó todo.

Era el año 1944 y el Carballeira ya era el restaurante de Barcelona preferido de funcionarios de alto rango, militares y contrabandistas de la época, que venían atraídos por los exquisitos mariscos que llegaban diariamente desde Galicia para hacer las delicias de todos ellos. Su ubicación privilegiada: cerca del mar y al lado de la antigua puerta del Port Vell, donde estaban las ya desaparecidas aduanas del puerto, lo hacía todo más propicio.

Esta era entonces la aventura empresarial del Sr. Millán y su esposa Francisca, un «templo» dedicado al mejor marisco gallego y fundamentalmente de tapeo. Así es como gracias al apoyo incondicional de clientes fieles, gallegos como su dueño, Carballeira se fue convirtiendo en punto de referencia en la ciudad y probablemente la primera marisquería de calidad en Barcelona.

Desde entonces, y a pesar de haber cambiado de dueño, se mantienen intactos los pilares de su éxito: Producto y servicio de primera.

El señor Millán era exigente y no se servía nada que no fuera de máxima frescura y calidad. Esto sigue siendo de estricto cumplimiento: sólo el mejor marisco traído a diario de las costas gallegas, así como algunas piezas exquisitas del Cantábrico y Mediterráneo.

Nuestros clientes son exigentes y saben apreciar esta calidad. También nos debemos a ellos en el servicio y este sigue asegurado por un personal con años de experiencia en la casa que conoce bien a sus clientes y el producto que se sirve.

Mesa-para-grupos-Restaurante-CarballeiraHoy, ya no está el señor Millán, pero continúa su retrato colgado en la pared, para dar la bienvenida a sus clientes. Porque ante todo, Carballeira mantiene su esencia, como corresponde a un sitio tan emblemático de Barcelona.